Ikea y el periodismo

Hace unos días tuve la suerte de conversar largo con Xavier Mas de Xaxas, de La Vanguardia. Entre otras cosas sugerentes -que me hacen pensar estos días y que ya escribiré en su momento-, hablamos de Ikea. Y es que en su libro "Mentiras" hace una metáfora ilustrativa de nuestra profesión con la exitosa empresa sueca. "El mueble perfecto -dice- está en los valores (...). A la gente le gusta tanto Ikea porque se identifica con sus valores: sencillez, funcionalidad, sobriedad y modernidad". Primer reto para el periodismo: redefinir los valores (verdad, objetividad, independencia y servicio público). Según Mas de Xaxas la gente acude a Ikea porque "de algún modo cree que Ikea se esfuerza en beneficiarle". Esto es un segundo reto para el periodismo: edificar sobre la lealtad al ciudadano. "Allí no van a darle gato por liebre -otra enseñanza de Ikea al periodismo- y en caso de que así sea podrá recuperar su dinero": nos hace falta un sistema de rectificación eficiente y proporcionado, sin devolver calderilla por asaltos millonarios. "Conoce su austeridad", dice de Ikea y, para el Periodismo, ésta es ahora obligada. "Se fía, a pesar de los nombres impronunciables de sus productos. En ellos encuentra la personalidad y el carácter de la marca". Hay que recuperar la marca periodística aplicada a la información. Y por último una pista a la reflexión en la línea de los llamados prosumers: "Ikea trata a sus clientes con respeto e inteligencia, al contrario que muchos diarios, y a la gente le gusta sentirse útil e implicada. Ikea implica al cliente en el proceso de fabricación (los muebles se montan en casa) a cambio de una rebaja, y él acepta el trato porque lo ve justo y conveniente". Así que, a tomar nota, porque esto es rentable.

No hay comentarios:

Publicar un comentario